Queridos lectores...
Cuidado con los francotiradores que, invisibles o visibles, te pueden pegar un tiro en la nuca o en tu masa neuronal solamente por el mero placer de mataros o haceros sufrir.
MEDITA.
CUENTO: LA BALA.
En la actual guerra de Ucrania un francotirador se jactaba de que sus hijas, las balas empleadas para matar, siempre cumplían como buenas hijas con su cometido sin pestañear; pero un día después de exhalar su fusil la última de sus hijas recogió sus cosas y volvió a su base sin confirmar que había matado a otro civil, no paramilitar, y cuando almorzaba junto a sus compañeros, cuando se jactaba de sus genocidas muertes, recibió un fuerte impacto en la nuca que acabó con su vida. Resultado de la autopsia:
Causa del fallecimiento muerte por una de sus hijas que rebotando, rebotando, rebotando se fundio con su amado padre en cuerpo y alma.
A todas las víctimas de la guerra de Ucrania y de otras guerras, olvidadas por oscuros intereses, en la que han muerto o han sido violadas muchas mujeres, niños y hombres, no paramilitares, si no dignos civiles, convirtiéndose éstos en víctimas de crímenes de guerra, genocida, de este nuevo Adolf Hitler del siglo XXI, cáncer a extirpar de esta humanidad: Vladímir Vladímirovich Putin, ex oficial de “inteligencia” ruso.
Alejandro Dieppa León.
ADLEÓN
☯️
Por una sociedad mejor, Por un mundo más justo.
Frase y cuento de mi serie:
Meditando en un templo Shaolin.
Foto de mi álbum de ilustraciones a lápiz.
Derechos de propiedad intelectual reservados, de la frase y cuento, del autor Alejandro Dieppa León, España, Islas Canarias. Gran Canaria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario