HE GANADO METROS A LA VIDA .
HE GANADO ESPACIO AL TIEMPO.
HE GANADO VERBO AL ELEMENTO
QUE SEMPITERNO NUNCA ME DOMINA.
HE GANADO ESCULPIDA SAPIENCIA.
HE GANADO SER EN UN NO SIENDO.
HE GANADO UN DATO AL CONCEPTO
Y A ESE PUNTO QUE ME MARGINA.
GANO PORQUE MI ESENCIA DOMINA
A ESE DISPARATADO DIVERTIMENTO
QUE AJA LA QUE PUEDE SER DULCE VIDA
DESBASTADA DE ENGAÑO Y MENTIRA
O ENJUGADA EN UN QUINTO ELEMENTO
QUE AÑORA LA LIBERTAR TAN QUERIDA.
Ganancia y pérdida o, si lo preferís, pérdida y ganancia son los dos platos de una balanza de carne y hueso en la que nos basculamos durante toda nuestra vida....
¿Pero cuándo ganamos y perdemos realmente?
Mi idea es que perdemos cuando aceptamos la derrota, tierra y polvo vertidos en el platillo de este estadio, por nosotros mismos o por otros, y ganamos día a día cuando aceptamos los acontecimientos como nos vienen esgrimiendo la frase:
"Esto es lo que toca y lo acepto".
Pero también ganamos cuando damos un paso atrás (recordemos que: "una retirada a tiempo es una victoria"), sea simplemente para meditar o para buscar en lo profundo de nuestra conciencia un nuevo camino por donde seguir adelante: Solo o en compañía... En un escogido silencio o en eterna oración...
Sea como fuere yo acepto el hecho de que también he ganado y gano cuando he perdido, que he ganado cuando he desaparecido... que he ganado en todo lo que me ha acontecido porque en ese compás, en ese paso atrás, mi esencia vital se ha vuelto a revitalizar.
Por eso me atrevo a aconsejarte que busques tus ganancias también en tus pérdidas, que las pongas en el activo de tu ser y veras como también podrás verte a ti mismo o misma y hasta el mundo de otra manera.
GÁNATE A TI MISMO, NO HAY NADA MALO EN ELLO.
Alejandro Dieppa León.
